El clima está cambiando, y se trata de un cambio que ya repercute en todos los ámbitos de nuestra vida, desde lo que comemos y dónde vamos de vacaciones hasta qué y cómo conducimos. Dada la enorme importancia del Acuerdo de París sobre el cambio climático, nos comprometemos a limitar el calentamiento global por debajo de los 2 grados centígrados y a alcanzar el nivel de emisiones cero en 2050. Esto implica que el cambio también llega para nosotros.
A escala mundial, el transporte representa alrededor del 25 % de las emisiones de CO2, por lo que la transición hacia soluciones de transporte descarbonizadas es tan real como urgente si queremos cumplir nuestros compromisos climáticos. Para muchos, el paso a la movilidad eléctrica es el camino a seguir, algo inevitable y que ya está agilizándose. En la actualidad, nos acercamos con rapidez a un punto de inflexión: los vehículos eléctricos han superado en ventas al diésel y alcanzarán un máximo histórico en 2022; supondrán el 13 % de los vehículos vendidos en todo el mundo. Se calcula que en 2030 habrá entre ocho y once millones de vehículos eléctricos en las carreteras del Reino Unido, lo que se traduce en uno de cada cuatro coches y hasta 230 millones en todo el mundo, y que el cambio se acelerará. La legislación de todo el mundo está impulsando esa transición. Por ejemplo, numerosos países van a prohibir la venta de coches con motor de combustión interna en 2030, y solo los híbridos que cumplan estrictos objetivos de emisiones estarán disponibles hasta 2035. Así pues, en apenas 13 años, todos los coches nuevos funcionarán con combustibles alternativos.
Más modelos de vehículos eléctricos que nunca
Todos los fabricantes de vehículos están desarrollando sus gamas de vehículos eléctricos a gran velocidad: en 2022 habrá cinco veces más modelos de vehículos eléctricos que en 2015. Y no se trata únicamente de coches, sino de vehículos de todo tipo, desde las furgonetas de dos toneladas hasta los vehículos articulados de 44 toneladas. Lo fundamental es entender que no todos los vehículos eléctricos son iguales; no hay una solución universal. Algunos están desarrollando trenes de transmisión integrados en las ruedas en los que se monta un motor eléctrico en la posición de cada rueda; otros se decantan por un enfoque más convencional en el que un solo motor obtiene la energía del conjunto de las baterías de tracción. Las baterías que se utilizan hoy en día también evolucionarán rápidamente, ya que los avances en la tecnología impulsarán la transición a medida que los fabricantes busquen la forma de reducir el tiempo de carga de un vehículo. La infraestructura de recarga tendrá asimismo una gran influencia. La constante aquí es el cambio, por lo que es primordial que quienes reparan o realizan el mantenimiento de los vehículos estén preparados.
Amenazas y oportunidades para los talleres de reparación
Tanto si se trata de una reparación como de una revisión, el enfoque tendrá que cambiar. Recuerde que en los vehículos eléctricos no hay cambios de aceite, bujías, filtros de combustible, embragues ni escapes; el mantenimiento se centrará en los filtros de aire, el aire acondicionado, el líquido y las pastillas de freno, aunque estas pueden durar el doble en un vehículo eléctrico que en uno convencional. Entender los vehículos eléctricos y convertirlos en una oportunidad de beneficio en el mercado de repuestos supondrá un reto. Los talleres y técnicos que acepten el cambio prosperarán; otros se enfrentarán a un parque de vehículos en declive y, por tanto, a menos oportunidades de ser rentables.
Enorme escasez de habilidades
La realidad es que la gran mayoría de los técnicos actuales no están cualificados para trabajar con vehículos eléctricos. El IMI (Institute of the Motor Industry, Instituto de la Industria del Motor) del Reino Unido sugiere que solo el 3 % de los técnicos están plenamente cualificados para mantener y reparar los vehículos eléctricos, lo que supone un enorme déficit de competencias. Los fabricantes de vehículos se esfuerzan por formar a sus técnicos, pero en el mercado posventa la disponibilidad de información de alta calidad para el diagnóstico y la formación es limitada.
La primera solución mundial de Autodata
Para apoyar a sus clientes frente a las complejidades del cambio, aprovechando sus más de 50 años de experiencia, Autodata ha introducido de serie el acceso ilimitado a los vídeos de formación y diagnóstico integrados en la plataforma. Consta de más de 60 horas y 350 vídeos de contenido a medida que abarcan la explicación, el diagnóstico y la reparación de las nuevas tecnologías de los vehículos, desde los ADAS hasta los híbridos, pasando por los vehículos totalmente eléctricos y conectados. Este contenido de vídeo de diagnóstico a la carta es una potente herramienta de referencia para que los técnicos comprueben sus reparaciones en tiempo real al compararlas con una amplia biblioteca de información sobre vehículos de los propios equipos originales. Los usuarios recurren a nuestra creciente colección de vídeos, creados por expertos para expertos, para contribuir sobre todo a minimizar las interrupciones y los retrasos, al tiempo que se maximiza la productividad y la evolución de los técnicos.
El contenido ya está disponible en inglés, francés y español; en el futuro se incorporarán más idiomas. El vídeo que desea, para el vehículo que desea, está a un solo clic. Convertimos a Autodata en el socio de confianza de los talleres para construir su negocio y prepararlo para el reto de los vehículos eléctricos del mañana.